Estar embarazada en verano son todo ventajas. O casi

Es más fácil tener una alimentación saludable: Fruta fresca, ensaladas variadas y mucha, mucha hidratación. Alimentos todos mucho más apetecibles en verano que en invierno cuando las salsas, las grasas y las comidas pesadas nos llaman la atención poderosamente.Deporte a la medida: Casi todas las actividades recomendables durante el embarazo son más accesibles y agradables en verano. Nadar y caminar a discreción hará que llegues al parto en la mejor forma.
El verano es ideal para ahorrar en tela: Gracias al calor se necesita menos ropa de embarazada para los últimos meses, cuando resulta más difícil reutilizar la ropa de antes del embarazo. Unos cuantos vestidos sueltos van perfectos para atravesar el calor embarazada y divina.

Sin bajarse de la hamaca: Nada mejor para la hinchazón de pies que ponerlos en alto. Hay que aprovechar para tomar sol plácidamente. Tenés la excusa perfecta, descanso por prescripción médica.