El poder de los abrazos: voluntarias de la nueva Maternidad Provincial acompañan a bebés prematuros.

Desde Protectia, nos acercamos a las «Abrazadoras» del Hospital Misericordia, voluntarias que, con su entrega desinteresada, brindan amor y consuelo a los bebés prematuros. Una historia que destaca la fuerza del amor para transformar vidas.

En una jornada llena de emociones y gratitud, Protectia, empresa referente en la preservación de células madre, se acercó a la nueva Maternidad Provincial para rendir homenaje a las voluntarias que participan del programa «Abrazadoras». Este proyecto, que tiene como objetivo proporcionar afecto y contención a los pequeños que llegan al mundo de manera anticipada, conmovió a los integrantes del Banco de Células Madre por su cercanía en el compromiso con el cuidado del bienestar de las familias.

Cuál es la tarea de las Abrazadoras.

El modelo para el programa de voluntariado fue implementado en Córdoba en 2017, inspirado en una acción similar realizada en Canadá. El voluntariado está enfocado en brindarles a bebés recién nacidos o prematuros contacto piel a piel durante dos horas continuas, para mejorar su desarrollo neurológico. Esta acción se brinda a los bebés que no pueden estar de manera constante con su madre o padre, ya que ellos presentan algunas situaciones limitantes para asistir a diario.

Con autorización de los padres, la voluntaria abraza al bebé durante el tiempo estipulado para que la estrategia sea efectiva y el niño pueda dormir en contacto humano. A aquellos niñitos que están entubados o tienen muchas vías o sondas colocadas, se les da la mano o se les toca el pecho y está comprobado que eso reduce los niveles de estrés no sólo en los niños sino también en todo el entorno hospitalario porque reduce los llantos.

Cómo colaborar.

Actualmente son 50 las voluntarias que se reparten en turnos de tres horas, de lunes a sábado. Para sumarse al voluntariado o colaborar con donaciones se las puede contactar en la nueva Maternidad Provincial y en su perfil de Instagram.

La visita de Protectia no solo estuvo marcada por la entrega de algunos presentes y muestras de cariño a las voluntarias, sino que resaltó también la conexión implícita entre la empresa y el programa hospitalario, ya que ambas partes comparten un propósito común: cuidar la familia y promover el bienestar del recién nacido, ya sea a través de la ciencia aplicada a la conservación de un material biológico tan valioso como es la sangre de cordón umbilical, o mediante gestos sencillos pero tan trascendentales e importantes como brindar un abrazo a un bebé prematuro.

El amor y la dedicación de las voluntarias de «Abrazadoras» y el compromiso científico de Protectia se entrelazan de manera única, recordándonos que el afecto y la atención tienen un impacto directo en la salud de una persona. Desde el calor del pecho materno hasta la preservación de las células madre, cada gesto cuenta en la construcción de un futuro más consciente, saludable y lleno de posibilidades para las familias que atraviesan momentos difíciles.